En doce horas

POR PEPE MONFORTE

Arcos, abajao por lo alto

Pocas ciudades del mundo tienen tanto monumento y tanta historia en tan pocos metros cuadrados. Las cuestas de Arcos cuentan muchas historias pero el lado gastronómico no se queda atrás: abajao, una sopa que casi parece una tortilla, bollos de Arcos, tiernos y con un toque de ajonjolí, vinos tintos, quesos… 12 horas muy intensas.

9.00

Venta Pinto

Peazo de rebaná en la Junta de Los Rios

Los desayunos gigantes despiertan pasiones. En Arcos se puede disfrutar de uno de los más afamados, las grandes rebanás de pan cateto que ponen en la venta de La Junta de Los Rios . Para acompañar hasta cinco “untamientos” disponibles: Manteca colorá, mantequilla, zurrapa blanca, zurrapa colorá y zurrapa de hígado. Pero no sólo vale la pena el desayuno, sino el entorno de este establecimiento con más de cien años de historia. En la tienda que tienen se pueden encontrar desde una exposición de gorras de paño hasta mieles, jamones, grandes tarros de legumbres, una exposición de navajas u otra de cántaros de barro. El establecimiento está en la carretera Arcos Medina, km. 7.

10.00

Santa Lucía

Paseo a caballo

Hay que digerir el desayuno intenso. ¿Qué tal un paseo a caballo? El centro hípico Las Nieves ofrece paseos de algo menos de una hora de duración para jinetes poco experimentados. Se puede contratar con un mínimo de dos personas y se puede dar una vuelta por los alrededores de sus instalaciones situadas en la carretera que va de Arcos a Gibalbín.

11.00

Cárnicas El Alcázar

Vino…

Arcos fue una de las pioneras en la provincia de Cádiz en cultivar uvas tintas, en esta nueva revolución vínica que tiene la provincia. En la carretera de Alberite, en el kilómetro 4, se aparece una gran finca que aloja a las bodegas Huerta de Albalá. Sus vinos han logrado numerosos premios. Se pueden concertar visitas en el teléfono 956101300 y obtener más detalles sobre sus vinos en huertadealbala.com.

12.00

Los Pescaítos

…pan y queso

Ya puestos, se puede abrir una botellita del vino para acompañarlo con pan y queso… dicen que sabe a beso. El pan se puede adquirir en el horno Artesa , situado en el polígono El Peral. El sitio es una verdadera tentación. Tienen desde pan cateto a panes rellenos, además de bollería. Desde el despacho se ve como trabajan en el obrador. Para el queso hay varias opciones. La Serranía es una quesería que acaba de abrir en la ciudad. Hacen quesos frescos con leche de cabra payoya. Se pueden comprar en los supermercados Super Arcos. En el centro, en la calle Debajo del Corral está el Rincón del Abuelo Manuel, donde venden quesos de la quesería La Abuela Agustina de la vecina Grazalema.

13.00

Los Pescaítos

Arcos desde abajo

Para ver la grandeza de esta ciudad, es mejor verla primero desde abajo, antes de adentrarse por sus calles. Se puede empezar el camino por el puente de San Miguel (calle Callao), un curioso puente de hierro construido en el primer cuarto del siglo XX y que se conserva bastante bien. Desde ahí se puede rodear la ciudad, a pie o en coche por la carretera que conduce hasta la entrada del casco antiguo.

14.00

Los Pescaítos

Abajao en cuesta

La taberna Los Jóvenes Flamencos está en la calle Deán Espinosa. Su terraza está en cuesta y el interior tiene encanto. Aquí se puede degustar, en tapa, el plato tradicional de Arcos, el abajao, una sopa que se parece más a una tortilla y que se hace con pan cateto y espárragos. Ya puestos se puede tomar también un poco de cordero. Antes para abrir boca, una tapa con una copa de Jerez en la taberna Taberna San Pedro , en calle del mismo nombre… tiene encanto.

15.00

Innovación gratinada

En Avenida 34 (avenida Miguel Mancheño) se puede degustar la otra comida de la Sierra de Cádiz. El cocinero José Antonio Saborido ofrece propuestas imaginativas que sirve en platitos de esos preparados para compartir. Algunas cosas que suenan bien: Carrillada al horno con queso viejo, salmón con salsa de hinojo o carpaccio de calabacín. Para colmo, precios moderados.

16.00

Paseo en cuesta

Desde Avenida 34 se puede ir pueblo arriba. Primero la plaza de España y luego subida en cuesta por las calles Debajo del Corral, Cuesta de Belén y Deán Espinosa. Casi todas las casas tienen algo que contar. Calles estrechas, la iglesia de San Juan de Dios, la casa palacio del Conde del Aguila, el castillo ducal, que tan sólo se abre a visitas cuatro veces al año y, sobre todo, la basílica de Santa María de la Asunción.

17.00

Café, dulces y vistas

La basílica está en la plaza del Cabildo, al fondo hay un balcón desde el que se ve casi media provincia de Cádiz…casi da un poquito de jindoi asomarse. Justo al lado, y también con vistas espectaculares está el Parador de Arcos. Su cafetería tiene una terraza que ofrece vistas de regalo. Si hace frío en el salón interior hay también un espectacular ventanal que permite verlo todo. Por si no fuera suficiente ofrecen para acompañar los dulces del convento de las mercedarias, que siguen despachando sus especialidades tras un torno de madera.

18.00

Toca bajar

Tras la merienda toca bajar las cuestas. Seguimos hacia abajo por otro paseo monumental: Marqués de Torresoto, calle Botica, San Pedro, la plaza del Cananeo. En medio del paseo se aparece otro hito, la iglesia de San Pedro. Tiene elementos de varios estilos arquitectónicos. La bajada te deja con la boca abierta… habrá que llenarla con algo.

19.00

Los bollos de Arcos

Es un dulce singular. En la ciudad hay varias pastelerías que lo elaboran: el horno Artesa, la panadería Morilla o la de Susano. Está última está en la calle Matrera Abajo y nos coge de camino en nuestro camino descendente. Los bollos de Arcos son unos bollos, como si fueran un donut aplastao, que están hechos con aceite de oliva y almendras. Son tiernos y aromatizados con ajonjolí, un dulce que a pesar de su larga historia sigue estando muy actual.

20.00

Paseo por el lago

Antes de cenar, es hora de un paseo. El entorno del lago de Arcos vale la pena verlo. Se puede contemplar desde el puente que hay en la ciudad a la salida hacia El Bosque o acercarse hasta las inmediaciones del hotel Mesón de la Molinera situado al pie del embalse. Si te coge en horario de atardecer el momento vale mucho la pena.

21.00

Cena con duende

El cocinero Pablo Vicuña decidió en el año 2014 hacerse con un pequeño hotel y restaurante que hay en la carretera que va de Arcos a Algar. Si el tiempo acompaña en la La casa Grande , como se llama el restaurante, lo suyo es cenar en la terraza, pero su salón interior también es agradable. Vicuña ofrece una cocina que juega a dos bandas, entre la tradición y la innovación, con presentaciones cuidadas y equilibrio de sabores. Ya puestos se puede uno quedar hasta a dormir. Si te quedas a dormir: Hay tres hoteles en el casco antiguo, en la zona monumental que tiene como atractivo unas estupendas vistas desde sus habitaciones: El Parador de Arcos , La casa Grande y el hotel El Convento.

Mapa

  • 1. Junta de los Ríos
  • 2. Centro Hípico Las Nieves
  • 3. Bodega Huerta de Albalá
  • 4. Horno Artesa
  • 5. Quesería La Serranía
  • 6. Puente de San Miguel
  • 7. Taberna Jovenes Flamencos
  • 8. Taberna San Pedro
  • 9. Avenida 34
  • 10. Parador de Arcos
  • 11. Marqués de Torresoto
  • 12. Iglesia de San Pedro
  • 13. Mesón de la Molinera
  • 14. La Casa Grande
  • 15. Parador de Arcos
  • 16. Hotel El Convento